Protege tu empresa ante cualquier situación de crisis y prepárate con un buen plan de contingencia.
“No estar preparado es prepararse para fracasar”.
-Benjamin Franklin
Un plan de contingencia detalla las medidas que se deben tomar para garantizar que una empresa pueda continuar operando en caso de alguna crisis o emergencia. Puede tratarse de un huracán, terremoto, fuego o cualquier otro fenómeno natural. Alternativamente, pudiera ser una crisis financiera o de relaciones públicas.
Independientemente del escenario o la situación, tu empresa debe estar preparada para manejar cualquier incidente que represente un riesgo a su operación continua.
No se puede controlar un fenómeno natural, por ejemplo. Lo que sí puedes controlar es la reacción al impacto de dicho fenómeno. Se puede reaccionar de manera oportuna, adecuada y efectiva ante estos incidentes si se tiene un plan de contingencia; un plan de acción.
Un plan de contingencia tiene varios propósitos. El principal es proteger la vida y seguridad de los empleados de quienes visitan tu negocio (clientes, suplidores, etc.).
El segundo objetivo es resguardar tu negocio, cumplir con sus obligaciones contractuales y continuar aportando a la economía local. Al hacerlo, asegurarás el empleo y protegerás el sustento de tus trabajadores. Esto tiene un efecto multiplicador en la economía.
Con estos objetivos en mente, identifica todos los panoramas de catástrofe, crisis o emergencia que pudieran llevar tu empresa a la quiebra. Desarrolla tu plan de contingencia contemplando las peculiaridades de cada escenario.